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Aquel futuro que el cine de ciencia ficción nos venía prometiendo, con autos voladores y robots haciendo todo por nosotros, poco a poco se va materializando.

Si bien la inteligencia artificial se sumó como un actor que no muchos habían podido anticipar, los vehículos particulares que se transportan por el aire aún no se popularizaron. Y los pocos modelos existentes – por ahora, apenas prototipos – se vienen produciendo en naciones muy caracterizadas por los avances tecnológicos, lejos de estas tierras.

Sin embargo, parece, Brasil podría acercarnos a ese mundo de fantasías, ya que la gigante Embraer, fabricante de aeronaves, acaba de anunciar que comenzará a producir los ya conocidos eVTOL a través de su compañía subsidiaria Eve.

El proceso de producción de autos voladores se llevará a cabo en Taubaté, São Paulo. Se especula con que en la segunda mitad de 2023 comenzarían los procesos, en 2024 las etapas de testeos y en 2026 las entregas.

De acuerdo a la empresa, ya hay 26 clientes que solicitaron unas 2.770 aeronaves.

En el comunicado de anuncio, André Stein, codirector ejecutivo de Eve, explicó que “cuando empezamos a buscar un lugar para fabricar nuestro eVTOL, quisimos replantearnos cómo podría construirse la aeronave utilizando las últimas tecnologías y procesos de fabricación, combinados con otros aspectos como la cadena de suministro y la logística”.

La propia Eve anunció también quiénes serán sus tres proveedores principales: Nidec Aerospace, que enviará los sistemas de propulsión eléctrica, BAE Systems, que creará los sistemas de almacenamiento de energía, y DUC Propeller Propellers, que hará los rotores y las hélices.

Un punto clave para la producción en serie de este tipo de dispositivos es la obtención de las licencias y certificaciones obligatorias. Al respecto, la nueva fabricante sabe que será un proceso difícil, pero confía en que la experiencia previa de Embraer jugará a su favor: en los últimos 25 años, la compañía brasileña recibió certificaciones para 30 modelos.