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Cómo es el bus eléctrico santafesino que llegará pronto al mercado

Desde Rafaela, una reconocida compañía de autopartes comenzó a diseñar un bus eléctrico que comenzaría a venderse en 2024

El boom de la movilidad sustentable ya casi no deja rincones del planeta sin visitar, por eso no sorprende que desde la pujante ciudad santafesina de Rafaela se esté terminando de diseñar un innovador bus eléctrico para transporte de pasajeros a nivel urbano.

La compañía encargada de este desarrollo es la autopartista Basso S.A., una de las empresas más importantes de una ciudad muy caracterizada por todo lo relacionado con autos y motores.

BBB, como se conoce a la firma, tiene como principal aliciente ser la proveedora de válvulas para los motores de reconocidas automotrices como Ferreri, General Motors, John Deere y Harley Davidson, entre otras.

Sin embargo, y a pesar de tener una historia marcada por la fabricación de partes para motores a combustión, en Basso no son ajenos a la movilidad eléctrica, motivo por el cual, desde 2017, se abrió dentro de la fábrica un área dedicada a esta modalidad que fue bautizada Emotion 22.

Desde ese nuevo departamento, comenzaron a desarrollar un bus eléctrico hace más de cuatro años, finalizando con el diseño y ensamble en 2021. Lo único que resta por definirse en un 100% es el tipo de batería que usarán para este vehículo que fue pensado para el traslado de pasajeros a nivel urbano. En Rafaela esperan que el nuevo vehículo puedo moverse por las calles argentinas a partir de 2024.

En declaraciones al medio ON24, Mariana Basso, responsable del Sistema de Gestión Ambiental y de Higiene y Seguridad de las empresas y Coordinadora del producto, comentó que “en Basso hay sistemas certificados de gestión ambiental y de gestión de calidad, y a partir de estos procesos hacemos un análisis constante del entorno. La evaluación que hicimos para hacer el bus fue establecer qué productos podíamos desarrollar y, después de muchas investigaciones y exploraciones, decidimos trabajar en desarrollarlo en su totalidad, en las baterías y la micromovilidad”.

“Como el bus y la batería son proyectos distintos, pero complementarios, decidimos comenzar con ambos al mismo tiempo como primer objetivo. Desarrollar una batería es algo mucho más complejo de lo que puede parecer y lleva tiempos largos. Primero, hay que establecer los procesos productivos y certificarlos, y después viene la homologación de la batería fuera del país”, dijo la especialista.

Además del bus eléctrico, desde Emotion 22 trabajan también en la creación de una batería para un auto eléctrico que se está fabricando en la provincia de Córdoba, el cual forma parte de un proyecto oriundo de Canadá, pero con confección local: Espitirus Ultimate, un vehículo tres ruedas ideado por el argentino Fabián Magri.

Imágenes por: Cortesía