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Con cada ajuste en el costo del combustible, los conductores se enfrentan a un nuevo escenario al momento de llenar el tanque de sus vehículos. Frente a esta realidad, Infobae proporciona una herramienta para calcular cuánto cuesta llenar el tanque, explorando el impacto en los conductores argentinos y ofreciendo una visión detallada del panorama actual.

Desde principios de año, el precio de la nafta en Argentina ha experimentado varios incrementos significativos. Recientemente, YPF anunció un aumento para el mes de marzo, que refleja el ajuste del impuesto a los combustibles y un plus de recomposición de precios. Este panorama genera preocupación entre los conductores, quienes buscan anticiparse a los costos asociados al mantenimiento de sus vehículos.

Si consideramos los surtidores de YPF en la Ciudad de Buenos Aires, donde se concentra la mayor parte de la oferta a nivel nacional, el litro de nafta súper se sitúa en $800, mientras que la premium alcanza los 987 pesos. Estos valores, convertidos al tipo de cambio oficial mayorista, representan aproximadamente USD 0,95 y USD 1,17 por litro respectivamente. Sin embargo, la industria aspira a alcanzar un mínimo de un dólar y 1,2 dólares por litro para equipararse con los precios internacionales.

Pero, ¿por qué existen diferencias en el precio de la nafta entre provincias? Esta disparidad se debe a diversos factores, que incluyen los impuestos locales, los costos de transporte y distribución del combustible, y las políticas de precios de las estaciones de servicio. Por ejemplo, en la ciudad de Mendoza, los precios pueden variar significativamente en comparación con la Ciudad de Buenos Aires, reflejando la influencia de los impuestos provinciales y municipales, entre otros aspectos.

Además, es importante considerar el consumo de nafta de un vehículo y la cantidad de combustible necesaria para recorrer cierta distancia. El costo de llenar el tanque puede variar considerablemente según el modelo del automóvil, su antigüedad, el tipo de motor y las condiciones de manejo. En promedio, un vehículo de tamaño medio consume entre 5 y 8 litros de nafta cada 100 kilómetros en condiciones normales de conducción.