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Egipto quiere ser sede de los Juegos Olímpicos 2036

Egipto quiere convertirse en el primer país africano en albergar la cita deportiva más importante del mundo

Con el ejemplo de Senegal como estandarte, quien logró convertirse en la sede de los Juegos Olímpicos de la Juventud 2026, Egipto, duplicó la apuesta y se candidatea para ser sede de los Juegos Olímpicos 2036. El país africano, quiere convertirse en el primero en poder realizar la cita más importante del deporte a nivel mundial.

El ministro egipcio de Deportes, Ashraf Sobhi, confirmó que el país quiere ser la sede para los Juegos de 2036 y que presentará una solicitud formal al Comité Olímpico Internacional (COI) para convertirse en la primera nación africana en albergarlos. En este sentido, Sobhi afirmó, tras mantener una reunión reciente, que cuenta con el apoyo del Presidente de la Asociación de Comités Olímpicos Nacionales de África, Mustapha Berraf, y con el de Thomas Bach, presidente del COI.

Son tantas las ganas que tienen desde el gobierno egipcio de cobijar la cita mundial, que ya han comenzado con la realización de un complejo deportivo multimillonario, denominado “Ciudad Olímpica Internacional de Egipto”, a 45 kilómetros al este de El Cairo, en la nueva capital administrativa del país, que tiende a transformarse en uno de los mejores del planeta.

Desde su primera edición en el año 1896, África nunca ha podido celebrar dentro de sus territorios unos Juegos como país organizador. Parece que el gran adversario para el gran proyecto que tiene planeado Egipto, podría ser Madrid, España que tiene intención de volver a elevar su candidatura para intentar cumplir de una vez por todas un sueño que amenaza con convertirse en obsesión.

Además de Egipto y España aparecen con ganas de realizarlos India, Rusia, Turquía y Ucrania. Entre las ciudades candidatas se destacan algunas muy conocidas, como Londres, que se volvería a presentar para terminar de sacar partido de las instalaciones que quedaron de 2012. Otras dos grandes ciudades europeas que quieren entrar en la batalla son Estambul y San Petersburgo, ofreciendo dos culturas totalmente diferentes.

Imágenes por: Cortesía