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La imposición de la “Indicación Geográfica Mendoza para el aceite de oliva virgen extra (AOVE)”, quedó formalizada en un acto que se realizó en la firma olivícola Zuelo, ubicada en el Departamento Maipú, lo que permitirá a los productos locales utilizar este sello como distintivo de calidad en el mundo.

Este sello, oficializado a partir de la publicación en el Boletín Oficial el pasado 7 de junio por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, diferencia la calidad de los aceites de oliva virgen extra (AOVE) de Mendoza a nivel local e internacional.

Mendoza es la primera provincia que recibe este signo para su producción olivícola, tanto a nivel país como en toda y América, y es la primera fuera de la Unión Europea y de Túnez, en África.

En el encuentro también se anunció que una reducción de medio punto porcentual en las retenciones que deben tributar las exportaciones de aceites de oliva que lleven el sello Indicación Geográfica Mendoza.

Durante el acto, el secretario de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Contigiani, recordó que cuando asumió el cargo, “el ministro Julián Domínguez me pidió que activemos y reforcemos el trabajo para sacar las dos leyes que nos permitió tener esta IG”.

“Con esto buscamos generar el reconocimiento al trabajo virtuoso, publico y privado, que le ponen un valor cultural a la producción, a un producto, a una región, que es el sentido último de una IG y de una Denominación de Origen. Por eso esto es muy importante y es histórico para los productores olivícola, porque a partir de hoy no solo van a tener un reconocimiento, sino un sello y una marca protegida”, subrayó el funcionario nacional.

“Haber alcanzado la primer IG de AOVE y que sea de Mendoza habla de la capacidad de organización y de trabajo que tenemos los mendocinos, incluso en las situaciones más adversas”, dijo, por su parte, Gabriel Guardia, enólogo especializado en aceite de oliva y uno de los investigadores de los dos estudios que fueron clave para la determinación de la IG Mendoza.

“Este sello de calidad es muy importante para todos los productores que elaboran excelentes aceites de oliva virgen extra, pero va a ser una gran oportunidad para las pequeñas marcas que elaboran excelentes productos pero no tienen la posibilidad de llevar a cabo campañas de marketing ni comunicación”, agregó el especialista.

A su turno, Alfredo Baroni, coordinador técnico del Instituto de Desarrollo Rural (IDR), y otro de los investigadores que junto con Guardia trabajaron fuertemente para promover la IG Mendoza, destacó los beneficios directos para el posicionamiento de Mendoza en el mundo.

“En la Unión Europea hay 103 Indicaciones Geográficas o Denominaciones de Origen y el único fuera de Europa hasta ahora era Túnez. Mendoza se suma a este selecto grupo y de hecho somos la primera IG para AOVE reconocida en todo el continente americano, lo cual nos posiciona muy bien en el mercado internacional”, puntualizó el técnico.

Por último, el ministro de Economía y Energía de Mendoza, Enrique Vaquié, dijo que “ahora se va a poder identificar y reconocer la calidad de nuestros aceites. Es algo que la olivicultura consiguió hace poco más de 40 años y que con el correr de los años ha logrado posicionarse y crecer”.

“Fue un trabajo conjunto entre el sector público, el privado y el académico. Ahora viene un trabajo conjunto entre los tres sectores para generar empleo, se invierta en esta actividad y se recupere este sector que fue tan importante para Mendoza”, completó el ministro.

Las Indicaciones Geográficas (IG) y Denominaciones de Origen constituyen herramientas que permiten diferenciar y hacer distinguible la calidad de un producto vinculada con su origen geográfico. En este caso, Mendoza.