Menu

El increíble “sol artificial” que lanzó China batió un récord

El Tokamak Superconductor, experimento asiático para crear un sol artificial, mantuvo un plasma de 120.000.000 ºC por 1.056 segundos

En los últimos días se viralizaron por redes sociales diversos videos de la puesta en acción del Tokamak Superconductor Experimental Avanzado, un experimento chino que, básicamente, es un sol artificial que fue pensado para generar un reemplazo de la energía que nos llega de la estrella principal de nuestro sistema solar.

Este dispositivo lleva 15 años funcionando, pero nunca había alcanzado tantos grados Celsius durante tanto tiempo. Pero el pasado 30 de diciembre, el también llamado “HT-7U, (EAST)” batió un récord al mantener un plasma de 120.000.000 ºC durante 1.056 segundos.

Esa marca del sol artificial supera a los 390 segundos que había establecido el Tokamak Tore Supra de Francia en 2003.

Científicos especializados en el tema y en este proyecto en particular aseguran que se trata de un importante logro en la búsqueda de la energía de fusión. Actualmente, el mundo vive una etapa de búsqueda de fusión nuclear como fuente de energía. Si se llega a los resultados y objetivos esperados, todo este cambio de paradigma podría derivar en la sustitución de las centrales eléctricas de carbón para apuntar a recursos renovables.

Concretamente, lo que se busca es imitar el funcionamiento del sol, que produce su luz y su calor por medio de la fusión.

En caso de poder aplicarse en nuestro planeta, estaríamos hablando de una fuente de energía segura, sostenible y abundante que no afecta al medio ambiente.

 

A diferencia de la fisión, la fusión une los átomos de los elementos livianos para crear átomos más pesados. Además, no produce desechos radiactivos directos: su producto final es el helio.

Otra diferencia es que la fusión no requiere de ningún combustible, mucho menos de uno no renovable, como podrían ser el uranio o el plutonio. Su funcionamiento se basa en elementos livianos y abundantes, como el deuterio, que podrían obtenerse en el agua del mar.

Imágenes por: Cortesía