La curiosa medida de Air New Zealand para mejorar la eficiencia
En busca de tener un consumo de combustible más eficaz, la aerolínea neozelandesa Air New Zealand pesará a sus pasajeros
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En busca de tener un consumo de combustible más eficaz, la aerolínea neozelandesa Air New Zealand pesará a sus pasajeros
Por disposición de la Autoridad de Aviación Civil de Nueva Zelanda, a partir de junio de este año, todos los pasajeros que se suban a un avión de la aerolínea Air New Zealand deberán pesarse antes de abordar.
Por ahora, solamente se aplicará esta curiosa medida en los vuelos internacionales que salgan desde el Aeropuerto Internacional de Auckland con el objetivo es mejorar la eficiencia del uso del combustible a futuro.
Además de la “encuesta sobre el peso de los pasajeros”, la compañía anunció que se definirá el peso de todo lo que esté a bordo del avión, incluyendo los equipajes y hasta la comida. Conocer ese dato les permitirá definir información sobre la carga y la distribución del peso de los aviones.
Alastair James, uno de los voceros de Air New Zealand, explicó en un comunicado que “para los clientes, la tripulación y las maletas de cabina, utilizamos pesos promedio, que obtenemos al hacer esta encuesta”.
Una de las primeras quejas que surgió al conocerse la noticia es que mucha gente puede sentirse reticente a que sus compañeros de vuelo conozcan su peso. Por ese motivo, la aerolínea se comprometió a mantener el dato de forma anónima. Es decir, no lo mostrará en ninguna pantalla. De hecho, al menos al comienzo, esta encuesta será voluntaria y no obligatoria.
“Sabemos que subirse a una báscula puede ser desalentador. Queremos asegurar a nuestros clientes que no hay ninguna pantalla visible en ningún sitio. Nadie puede ver su peso, ni siquiera nosotros”, explicó James al respecto.
En cuanto a la logística de cómo se buscará pesar a los cientos de pasajeros que abordan cada avión, la empresa explicó que les pedirá a las personas que se paren sobre una balanza digital en el momento del check-in, algo similar a lo que hacemos con las valijas. El dato pasará directamente al sistema, sin que ni siquiera el empleado de turno pueda verlo.
Imágenes por: Cortesía