La mayor interna en el área más débil de Perotti: la pelea entre el ministro de Seguridad y el jefe de Policía
Marcelo Saín y Victor Sarnaglia no se hablan hace meses y ahora la rivalidad sumó un nuevo capítulo
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Marcelo Saín y Victor Sarnaglia no se hablan hace meses y ahora la rivalidad sumó un nuevo capítulo
Marcelo Saín y Victor Sarnaglia. El ministro de Seguridad y el jefe de la Policía de Santa Fe. Dos de los hombres más importantes en la provincia a la hora de hablar sobre los responsables de seguridad no se hablan desde hace meses. La tensa relación sumó un nuevo capítulo.
Hasta el momento, el gobernador solo intentó poner paños fríos entre ambos y sostener al de menor cargo en su lugar, ya que fue él quien lo fue a buscar.
El último roce fue este viernes. Sarnaglia pidió licencia por unos días, y Saín aprovechó y presentó una nueva persona en su cargo. El licenciado jefe policial adujo que no había renunciado y desmintió al ministro. ¿Quién conducirá la Policía ahora?
LOS ROCES ENTRE EL MINISTRO Y EL JEFE DE LA POLICÍA
El conflicto entre Saín y Sarnaglia tuvo varios capítulos y motivos. Muchos hablan de una buena relación desde que asumió el nuevo gobierno en la provincia de Santa Fe. Al menos correcta entre funcionarios. Sin embargo, la amistad cercana entre el jefe de la Policía y el gobernador Omar Perotti habría iniciado los chispazos.
En la ciudad de Santa Fe cuentan que fue Perotti en persona quien le ofreció el máximo de los cargos policiales a Sarnaglia, que estaba retirado desde 2006, en una de sus visitas a la casa de barrio El Pozo de la capital provincial.
El mandatario lo confirmó en declaraciones públicas el primer día en funciones, previo a ingresar a la asunción de Emilio Jatón en Santa Fe. “Fui a buscar a Sarnaglia para volver a imprimirle valores a la fuerza. Es algo que hemos hablado mucho y que él podrá hacer”, sentenció ese día el gobernador. Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que las idas vueltas entre el jefe de policía y Saín salgan a la luz.
La primera señal fue el día que comenzó el aislamiento obligatorio en todo el país. El 20 de marzo, Sarnaglia estuvo sentado junto a Perotti y al ex ministro de Salud, Carlos Parola, en una conferencia que tenía tinte político. El gobernador la usó para reclamar por la ley de necesidad pública y pedirle a la oposición que se ponga a disposición para enfrentar el coronavirus. Ese día, varias versiones desde la cartera de Seguridad coincidían en que Saín sintió que ese era su lugar.
Al mes siguiente, la difusión de varios audios del ministro de Seguridad generó un fuerte encontronazo que se hizo público. Allí criticaba una decisión del presidente Alberto Fernández, una resolución del gobernador y trataba de “pelotudos a los gobiernos provinciales”. Saín no tenía duda sobre quien filtró esos mensajes que habían sido mandados a los jefes regionales de la Policía.
En los días posteriores hubo un reconocimiento público de ambos sobre sus diferencias al asegurar que no tenían diálogo. En ese momento, Perotti fue el que calmó las aguas. “No busquen electricistas para ese cortocircuito. Cuando uno tiene gente con temperamento pasan estas cosas”, fueron las palabras del gobernador el 1° de mayo en la apertura de sesiones legislativas.
El mismo día, Saín tuvo una entrevista con radio Aire de la ciudad de Santa Fe. Allí dijo, entre otras cosas, que “Sarnaglia es un jefe de lujo” y que “Santa Fe es un pueblo de chusmas”.
“Yo manejo una organización mucho más grande que el jefe de la Policía, son diversos los temas que tengo que atender. Entre él y yo hay tres funcionarios intermedios. Por qué tendría yo que estar todo el día con Sarnaglia”, se justificó.
A pesar del elogio, en los hechos, Saín corrió a Sarnaglia de la línea de mando. Le ordenó que evitara reuniones con intendentes o jefes comunales, que en ese momento buscaban cerrar sus territorios en medio de los operativos para garantizar el cumplimiento de la cuarentena.
A partir de allí pareció volver la calma en la relación. Hasta hace unos días atrás. El Ministerio Público de la Acusación destapó una investigación sobre juego clandestino y extorsiones en Rosario. En ese marco, en un material informático secuestrado en el domicilio de la secretaria del empresario Leonardo Peiti, que se refería a coimas apareció la palabra “Sarna” como uno de los cobradores.
Peiti describe pagar mensualmente por cada “garito” unos 10 mil pesos por mes para comisarios y otros diez mil pesos para un tal “Sarna”.
Al haber policías implicados, las suposiciones recayeron sobre Sarnaglia quien se defendió acusando al ministro de Seguridad de armarle una “tremenda operación”. “Una sola persona que yo sepa me dice Sarna y ese es Saín”, señaló.
“Estoy cansado, con los nervios a la miseria. Me arman una tremenda operación pegándome con algo en lo que no tengo nada que ver. Y yo tengo información de que me la armó Saín”, indicó en uno de los audios que fueron difundidos.
“Esto se aclara y yo vuelvo. El viernes declaro y el lunes estoy de vuelta en mi cargo. Ahora vamos a saber quién manda, si este con sus operaciones, llenándole la cabeza al gobernador, sin plan y sin conocer la idiosincrasia de la provincia”, fueron las duras palabras.
En ese contexto, pidió licencia, declaró este viernes y tenía pensado volver el lunes. Sin embargo, en dicha jornada Saín, a través de la red social Twitter, subió una foto con Emilce Chimenti y la presentó como la nueva jefe de Policía de la provincia. Allí aseguró que estaban trabajando “en la conformación de los nuevos mandos superiores de la institución policial”.
Al enterarse Sarnaglia aseguró que él no había renunciado y lo tomó como una jugada más de Saín en su contra.
¿Cómo seguirá la historia? ¿Tendrá un nuevo capítulo esta relación? ¿Quién tomará el mando de la Policía en la provincia?
Imágenes por: Gobierno de Santa Fe