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Con una economía argentina que no termina de acomodarse tras la pandemia, organizar y, especialmente, solventar un viaje al exterior, se vuelve difícil para la clase media. Por eso, las temporadas bajas de los destinos internacionales vuelven a aparecer en el radar de muchos viajeros y la cantidad de consultas sobre los mejores lugares para visitar en Europa en otoño no para de crecer.

El 21 de septiembre, cuando en Sudamérica arranque la primavera, en el “Viejo Continente” comenzará el otoño, para muchos una de las estaciones del año menos elegidas, pero una muy atractiva para el bolsillo argentino.

David Prior, fundador del club de viajes Prior, dijo en declaraciones a Bloomberg Línea que “el shock de los precios de esta temporada fue muy real, incluso para los viajeros que tenían los medios para permitírselo. Lugares como las Baleares o Grecia eran demasiado calurosos para algunos, por lo que empezamos a ver que la gente se aleja de esos climas”.

Con sus declaraciones, Prior nos agrega que no sólo para los residentes de países con economías recesivas el otoño europeo aparece como opción, sino también para los mismos residentes de la región.

Así, uno de los principales destinos que aparece para conocer Europa en otoño es Santorini, en Grecia. Se trata de un sitio muy elegido ya que, al estar al sur del país, sus días cálidos se extienden bastante más allá de septiembre. Comprar un vuelo hacia Atenas para los meses de agosto o septiembre, puede permitirnos ahorrar unos cuantos dólares. Lo mismo sucede con los precios de los hoteles de la zona para esas épocas.

Otro de los elegidos para la temporada otoñal europea es el Lago de Como, en Italia. Valentina de Santi, propietaria del Grand Hotel Tremezzo, dijo en entrevista con Bloomberg que “octubre es uno de mis meses favoritos para estar en el lago. Todo se ralentiza y empezamos a tener un follaje increíble, pero sigue haciendo suficiente calor para salir en el barco todo el día”.

Las tarifas hoteleras de la zona pueden bajar hasta un 40% en el otoño y muchas aerolíneas reducen sus precios en vuelos a Italia para ese momento del año.

Otra alternativa para viajar a Europa en otoño es Praga, un sitio que mezcla cultura, gastronomía y lujo en una ciudad totalmente cosmopolita. Esta zona, además de ver reducidos sus precios entre septiembre y diciembre, también bajó sus tarifas turísticas por una especie de idea errónea que muchos viajeros se hicieron, que está relacionada con la guerra entre Rusia y Ucrania, a pesar de que el conflicto se está desarrollando a cientos de kilómetros de allí.

Volviendo a Italia, Puglia y Sicilia aparecen como dos grandes destinos de temporada baja en la Costa Amalfitana, donde encontrarás excelente comida, grandes playas y ninguna “aglomeración turística”. Al igual que pasa en Grecia, allí los días de calor se extienden bastante más allá del 21 de septiembre.

Muchos especialistas aseguran que, en el otoño, visitar este destino puede hacerte ahorrar hasta 1.500 euros entre viaje y estadía.

Finalmente, por sus playas y sus precios bastante más bajos que los de sus “vecinos” España y Francia, Portugal aparece como una opción accesible en Europa en otoño.

Puntualmente, recomiendan en esa época del año visitar Lisboa, el Valle del Duoro y las Azores. En este último sitio, en septiembre se realiza la temporada de la vendimia, lo que lo convierte en un lugar espectacular para disfrutar de almuerzos al aire libre.