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Verano 2024: cuánto cuesta vacacionar en Córdoba y Mar del Plata

La inflación impacta en los destinos turísticos de Córdoba y Mar del Plata, afectando los precios y reservas. Descubre los desafíos económicos del verano 2024

El tan esperado verano 2024 presenta desafíos económicos que afectan significativamente el turismo en diversas regiones de Argentina. En Córdoba, la preocupación crece ante las reservas que no superan el 50% para la primera quincena de enero. El aumento de precios en nafta y alimentos impacta directamente en la capacidad de las familias para planificar vacaciones.

La situación preocupa especialmente a los hoteleros de Villa Carlos Paz, destacado destino turístico de la provincia. La baja en las reservas no solo afecta la infraestructura turística, sino también la temporada de teatro de revista, que históricamente atrae a las obras más aclamadas a la localidad serrana durante el verano.

Para aquellos que buscan disfrutar de unas vacaciones en pareja, los precios de los hoteles de tres estrellas oscilan desde $56,000 en adelante. Las habitaciones familiares, destinadas a cuatro personas, alcanzan los $70,000, con promociones para cuatro noches que rondan los $238,000. Además, asistir a espectáculos en Villa Carlos Paz implica un desembolso adicional, con entradas que van desde $8,000 hasta $15,000, dependiendo del show y la ubicación.

La situación no es diferente en la Costa Atlántica, donde la ocupación hotelera se sitúa en un bajo 31%, considerablemente por debajo del 68% del año anterior. Mar del Plata, por su parte, experimenta un estancamiento en las reservas y contrataciones.

El secretario de Turismo, Marketing y Desarrollo Sostenible del Partido de la Costa, Guillermo Favale, atribuye la desaceleración a factores políticos, mencionando el impacto del triunfo en las elecciones de Javier Milei.

En Mar del Plata, la inflación y las políticas económicas generan estragos en el turismo. A pesar de ser uno de los destinos más populares para este verano 2024, la baja en las reservas de hoteles y alquileres alcanza casi un 50%. Los elevados precios de productos y comida impulsan a los turistas a optar por “vacaciones gasoleras”, llevando su propia comida para evitar gastos excesivos en la costa.

Los precios de alimentos en paradores de Mar del Plata son significativos: licuados de frutas a $2,500, porciones de rabas con dos latas de cerveza a $9,500 y comidas más sustanciosas, como una milanesa con papas fritas, que pueden superar los $9,000. Ante esta situación, muchos turistas eligen llevar comida preparada.

Con una ocupación hotelera del 45%, la situación en Mar del Plata refleja una realidad desafiante para el turismo. Los precios elevados impactan no solo en la elección de alimentos en la costa, sino también en las excursiones planificadas, llevando a algunos turistas a replantear sus actividades debido a los costos adicionales. La expectativa ahora está puesta en el próximo fin de semana para determinar el futuro del turismo en la región.

Imágenes por: cortesia